
Una mirada personal de la ciudad
Hace unas semanas, subí al piso catorce del nuevo edificio de una universidad, ubicado en la segunda cuadra de la avenida Arequipa, a unos pocos metros de la antigua embajada argentina. Casi tan joven como la institución a la que cobija, su irrupción en esa zona tradicional recuerda a los trenes que, según un viajero